Okito no es un caso similar al de Bankia. Es también una caja de la que desaparece un dinero que, una vez desaparecido, nadie sabe dónde está a excepción -curiosa coincidencia- de los autores de su desaparición. Desconocemos las razones del secreto de Bankia en este sentido, las nuestras son obvias, somo magos.
Mejor no pensar cuánto tiempo le hemos dedicado a desarrollar este campus para la formación de magos y quedarnos con los grandes momentos entre todos los magos que están participando y, sobre todo, los que nos quedan por disfrutar.
En nuestro gremio, como es natural, contamos con respetables magos de todas las tendencias sexuales pero, al decir que estamos “culeando”, nos referimos a una técnica que se ejecuta con las manos, no con el culo. Es un anglicismo de nuestro argot mágico, se lo aseguro
La semana pasada Jerito hacía girar una moneda sobre la punta de un alfiler. Es curioso observar cómo una superficie tan ínfima puede dar vida a una moneda. Es curioso también darse cuenta de que, algo tan intrascendente para el mundo como una tertulia de magos, la de Paco de Andrés, pueda haber alentado tanto mi vida.
Allí me encontré con An Ha Lim y pudimos rememorar algunas batallitas, no sólo las que pasamos en Valencia sino las Beijing. Adjunto una muestra de una de ellas en la habitación de un hotel de esta ciudad china en la que nos pusimos hasta las cejas de jamón y vino que colamos dentro de las maletas.
